¡Ecocidio en la Laguna de Rincón!
La Red Socioambiental Nacional exige al Estado frenar el acaparamiento del agua por parte del Consorcio Azucarero Central

SANTO DOMINGO, R.D.
La Red Socioambiental Nacional lanzó este lunes una dura denuncia ante el país y la comunidad internacional, de que se está cometiendo un «crimen ecológico» de proporciones históricas contra la Laguna de Rincón (Laguna de Cabral), uno de los humedales más importantes del Caribe insular.
Según la entidad, el Consorcio Azucarero Central (CAC), con el respaldo tácito y la negligencia del Estado dominicano, ha convertido este ecosistema en un escenario de ecocidio sistemático, desviando caños y afluentes para irrigar extensos cañaverales y reduciendo drásticamente los niveles de agua.
El resultado —advierten— es devastador: mortandad masiva de peces, desaparición de aves migratorias, pérdida acelerada de biodiversidad y el colapso económico de comunidades históricamente pesqueras como Cabral y Cristóbal, que dependían de la laguna como fuente de alimento, cultura y sustento.
“Estamos frente a un crimen ambiental que viola la Constitución, la Ley 64-00 y compromisos internacionales como la Convención Ramsar. No es un fenómeno climático inevitable, es una política de acaparamiento del agua que destruye un patrimonio natural de toda la nación”, alertó el ingeniero Leonardo Mercedes, representante de la Coalición Enriquillo dentro de la Red Socioambiental Nacional.
La organización recuerda que la Constitución dominicana declara el agua como bien de dominio público inalienable, pero que, en la práctica, el CAC actúa como “dueño absoluto” del recurso con la complicidad de las autoridades.
Exigencias de la Red Socioambiental Nacional
La entidad reclama al Estado dominicano:
– Intervención inmediata para frenar el desvío de aguas y restaurar los caudales naturales que alimentan la Laguna de Rincón.
– Suspensión de operaciones ilegales del CAC que afectan los ecosistemas acuáticos.
– Reintegro de las aguas sustraídas mediante el cierre de las vías abiertas para la extracción, en clara violación al carácter público del recurso.
– Un plan urgente de rescate ecológico, con participación de comunidades, científicos y organizaciones ambientales.
– Investigación y sanción a los responsables del daño ambiental, tanto en el sector privado como en las instancias estatales.
“La Laguna de Rincón no se negocia, se defiende. ¡El agua es del pueblo y no de los cañaverales del CAC!”, concluye el manifiesto de la Red, que advierte que el derecho al agua y a un ambiente sano no puede seguir siendo vulnerado.



