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Hallan muerta otra menor; sus familiares aseguran fue asesinada

SANTO DOMINGO NORTE, R.D.- La ola de crímenes, que desde hace tiempo azota al país, sigue incrementándose y otra adolescente, de 16 años de edad, ha sido asesinada.
Kimberly Esther Adón, estudiante, salió de su casa, ubicada en el sector Sabana Perdida, municipio Santo Domingo Norte, alrededor de las 11:00 de la noche del sábado, a “pasear” con unos amigos.
Horas después, la adolescente aparece, pero muerta, con el cuello roto, en la morgue del Hospital Ney Arias Lora.
Se convierte en una nueva víctima de la ola de delincuencia y criminalidad que azota al país.
De acuerdo a las informaciones, nadie sabe contar lo que pasó y “sus amigos” ahora no aparecen.
Esta versión fue dada por su tía Bienvenida Paredes, quien no cree la versión de que su sobrina sufrió un accidente.
La tía de la occisa declaró cuando el Instituto de Patología Forense le entregó el cadáver a la familia, le hicieron fotografías y videos del cuello roto.
Kimberly vivía con su abuela materna, Julín Adón, en Sabana Perdida, quien se quedó a cargo de ella cuando la madre de la menor murió, de un tumor cerebral, hace 5 años.
“La necropsia dice que mi sobrina murió por trauma contundente múltiple. Mi sobrina tiene un trauma severo en el cuello y esas personas saben lo que pasó”, aseguró José Antonio Martínez, tío de la adolescente, lo cual versión que fue confirmada por su tía Bienvenida Paredes.
Contaron que la jovencita le dijo a su abuela que iba a llegar al “Tanque” con sus amigos a comprar algo, pero no regresó.
El padre de la menor, Pablo Jáquez, dice que no quiere que hagan justicia, porque él la va a hacer con sus propias manos.
Kimberly estudiaba en el liceo Doña Enma Balaguer, tenía cuatro hermanos y quería ser médico.
El caso de esta jovencita se suma a los asesinatos de Emely Peguero Polanco (Salcedo), Rosalinda Yan Pérez (San Cristóbal) y Diocary Gómez (Fantino).
Sobre este último caso, la Policía no ha dicho nada y los «amigos» de la adolescente no han dado la cara.