8 de marzo, homenaje al ser sublime
Por Augusto Álvarez
Este domingo 8 de marzo, entre las heroínas de la patria, ¿por qué no incluir a las estrellas del hogar, a esas madres, a las cuales el comercio les fabricó un día especial?
Ellas, esposas y madres ejemplares fueron las que hicieron del peso un ripio, extendiendo así la subsistencia en el hogar.
A esas madres, cuyo hogar quedó quebrantado cuando la feminicidad se las llevó, siempre tendrán un especial espacio en los corazones de un pueblo que sabe honrar.
¿Cuántas madres victimas de feminicidios tenemos, mientras los hijos que nacieron y durante cierto tiempo convivieron con ellas, ¿qué es de ellos?
Ante la tragedia de los feminicidios, hemos solicitado a las ejemplares mujeres de la patria, nos permitan valorar el esfuerzo de esas madres que eliminaron desalmados mediocres.
Quedan en la historia las a hermana Mirabal (Patria, Minerva y María Teresa), tres flores hermosas, víctimas de la sangrienta tiranía de Trujillo.
También está la otra leyenda, que cayó en las garras de los 12 años del doctor Joaquín Balaguer. ¿Cómo olvidar a doña Florinda Soriano (Mamá Tingó)?
Entre historias y leyendas llega el 8 de marzo, justo cuando los asesinos de mujeres avanzan en sus propósitos de extinguir a las madres que también son heroínas, respetémoslas, no sólo en este 8 de marzo, sino, cada minuto de la vida.
