Centros de ayuda en Gaza se convierten en trampas mortales  

GAZA / 1 de junio de 2025

Lo que debía ser un lugar de alivio y esperanza se convirtió, una vez más, en un escenario de horror.

Al menos 30 palestinos fueron asesinados y más de 150 resultaron heridos este domingo tras un ataque de las fuerzas israelíes contra un centro de distribución de ayuda humanitaria en la ciudad de Rafah, al sur de la Franja de Gaza.

De acuerdo con reportes de la agencia palestina Sanad, tanques, vehículos militares y drones israelíes abrieron fuego directamente contra una multitud de civiles que se congregaban para recibir paquetes de alimentos y suministros en un punto gestionado bajo respaldo logístico de Estados Unidos.

La Oficina de Prensa del Gobierno en Gaza denunció en un comunicado oficial que estos centros de ayuda, presentados como “corredores humanitarios”, se están convirtiendo en “trampas mortales masivas”, donde la población vulnerable es atacada deliberadamente. Según las autoridades locales, aún hay heridos atrapados en el lugar debido al incesante bombardeo israelí que impide el acceso a los equipos de rescate.

Las cifras son escalofriantes: 39 muertos y más de 220 heridos en estos puntos de distribución tan solo en la última semana.

Herramienta de guerra

Desde Gaza se acusa al ejército israelí de usar la ayuda como un mecanismo de control y exterminio: forzar a la población hambrienta a concentrarse en puntos específicos para luego atacar. “Esto es una forma maliciosa y sistemática de convertir la asistencia en un arma de guerra”, afirmó la oficina gubernamental. Se responsabiliza directa y moralmente al ejército israelí y a la administración estadounidense, por su complicidad política y logística.

Los responsables en Gaza calificaron el proyecto de «ayuda por zonas de amortiguamiento» como una estrategia fallida y peligrosa, diseñada para encubrir maniobras militares y difundir la ilusión de una respuesta humanitaria, mientras se cierran los pasos fronterizos oficiales y se bloquea la ayuda genuina de organismos internacionales.

La nota concluye afirmando que estos hechos constituyen crímenes de guerra, de acuerdo con el derecho internacional y particularmente el artículo 2 de la Convención sobre el Genocidio de 1948, al vincular el hambre inducida con ataques masivos deliberados contra civiles.

Se hizo un llamado urgente a la ONU y al Consejo de Seguridad para que asuman su responsabilidad legal, abran los pasos fronterizos y permitan el ingreso de ayuda sin la supervisión ni interferencia del ejército de ocupación.

Más muertes

Mientras tanto, la ofensiva israelí no da tregua. Al menos 40 personas murieron y más de 170 resultaron heridas en las últimas horas como resultado de ataques aéreos y de artillería contra Gaza capital, Khan Yunis y Nuseirat.

En particular, se reportó el bombardeo de la vivienda de la familia Al-Saloul, ubicada cerca de la mezquita Al-Sunna, al sur del campo de refugiados de Nuseirat. En Khan Yunis, las fuerzas israelíes han intensificado su avance hacia las zonas orientales de Ma’an y Al-Qarara, acompañadas de fuego pesado y desplazamientos masivos.

La situación humanitaria en Gaza sigue deteriorándose rápidamente. La comunidad internacional enfrenta una encrucijada: o toma acciones concretas para detener la escalada o carga con la responsabilidad histórica de permitir que el sufrimiento civil continúe sin consecuencias.