¡Represión! Rajoy ordena a guardia y policía impedir referéndum de Cataluña

Reportan más de 40 heridos y robos de urnas

ESPAÑA.- Hay represión policial por dondequiera. El gobierno español, presidido Mariano Rajoy, está accionado violentamente para impedir, por cualquier vía, el referéndum de autodeterminación de Cataluña.

Los servicios de emergencia de Cataluña anunciaron el domingo haber atendido hasta el momento a 38 personas heridas en intervenciones represivas de la policía.

En un tuí, los equipos de salud relataron que «atendieron a 38 personas por los disparos de los cuerpos policiales españoles».

«Del total, 35 fueron levemente heridos, y tres, más gravemente. Nueve de ellos tuvieron que ser transportados a un centro médico. Se trata, básicamente, de contusiones, desmayos, ataques de pánico «, añadieron en Twitter.

Según varios testigos, la policía utilizó balas de goma.

Jon Marauri, originario del País Vasco, mostró una de esas balas recogidas tras una ofensiva policial contra cientos de manifestantes. 

Cercados por los activistas tras haber incautado urnas en una sección electoral, los agentes reaccionaron disparando. David Pujol, de 37 años, mostró la lesión en la pierna, causado por una de esas balas.

Ante la fuerza policial, el presidente catalán, el separatista Carles Puigdemont, denunció «el uso injustificado, irracional e irresponsable de la violencia por parte del Estado español».

Según él, la imagen externa del Estado «continúa empeorando y llegó hoy a niveles de vergüenza que van a acompañarlo para siempre».

«Será el Estado español que deberá explicar al mundo lo que hizo hoy en Cataluña», afirmó la presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, tras votar.

El representante del Gobierno español de Mariano Rajoy pidió al Ejecutivo catalán que ponga fin a la «farsa» del referéndum.

«El presidente regional de Cataluña, Carles Puigdemont, y su equipo son los únicos responsables de todo lo que sucedió ayer (el sábado) y por todo lo que podría suceder, si no ponen fin a esa farsa», declaró el representante para Cataluña, Enric Millo, en una entrevista de la comunidad.

La Policía Nacional y la Guardia Civil, dos corporaciones que enviaron un refuerzo de más de diez mil hombres a Cataluña, invadieron varias escuelas en toda la región para aprehender urnas y cédulas, en el intento de impedir la consulta prohibida por la Justicia española.

El propio Puigdemont no pudo votar en el gimnasio donde estaba previsto inicialmente, ya que la Guardia Civil entró a la fuerza y asumió el control.

Puigdemont siguió a una sección electoral cercana para depositar su papeleta. La modificación fue posible, porque en el último minuto, el gobierno catalán instauró un registro único de votantes. Con eso, los 5,3 millones de catalanes convocados a las urnas podrán votar en cualquiera de los 2.135 puestos anunciados.

La alcaldesa de Barcelona, la izquierdista Ada Colau, también criticó al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy. Este todavía no se ha pronunciado.

«Un presidente de gobierno cobarde inundó nuestra ciudad de policías. Barcelona, ciudad de paz, no tiene miedo «, tuitó Ada.