México lleva la voz de América a la Cumbre; reclama desmantelar la OEA

LOS ANGELES, California
México, en la llamada Cumbre de las Américas, actuó como un país libre, soberano y con sus propios principios.
A pesar de ser Estados Unidos, la nación organizadora de ese evento, le advirtió no tiene derecho a vetar a Cuba, Venezuela o Nicaragua.
Eso lo hizo al cierre de la Cumbre de las Américas, donde llamó a dejar atrás a la Organización de Estados Americanos (OEA).
“Nadie tiene derecho a excluir a nadie, por la razón que fuese, y menos porque haya diferencia política respecto a su régimen”, dijo el viernes el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
Lo hizo al cierre de la cita hemisférica, en alusión a la decisión de Washington de excluir a Cuba, Venezuela y Nicaragua de la polémica Cumbre, incumplir supuestamente la OEA.
Ebrard representaba a su país en la Cumbre, en ausencia del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien la boicoteó por las exclusiones propuso a Estados Unidos promover.
Propuso “un nuevo acuerdo e iniciar una nueva etapa en la relación con las Américas” y planteó dejar atrás a la OEA y construir otra entidad regional, una que sea realmente representativa y donde no existan hegemonismos ni exclusiones.
“Ya no la Organización de Estados Americanos, ya no el intervencionismo electoral, ya no las misiones que nos quieren certificar, porque no reconocemos que nadie nos certifique, somos países independientes, soberanos y orgullosos”, declaró, exigiendo, además, el fin del bloqueo impuesto por EE.UU. a Cuba.
La postura de México lo hizo ganar los elogios muchos sectores, que consideran no es títeres ni está sumido a Estados Unidos.