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¡Dios mío! Estoy sorprendido

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Mensaje 4184

 AYUDAME A SALVAR UNA VIDA 

 

 

Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?

¡Dios mío! Estoy sorprendidoToda una vida en la Iglesia desde niño, trabajando, participando, creciendo en la fe, debatiéndome entre el bien y el mal, por las presiones de las tentaciones que llegan para alejarte del Señor y ahora después de tantos años es cuando termino comprendiendo los planes del Señor para conmigo.

Bautizo, Confesión, Primera Comunión, Confirmación, Matrimonio, Unción de los enfermos en una ocasión que estuve interno, Orden Sacerdotal, a través de la ordenación diaconal, somos los diáconos los únicos a quienes el Señor les concedió la gracia de recibir los siete sacramentos.

Vergüenza y dolor por nuestras caídas, sacrificios para purificarnos y reparar, ayunos, abstinencias, Misas diarias, lecturas de las Liturgias de las Horas: Laudes, Vísperas, Completas, todos los días, han sido los ejercicios espirituales que nos acompañan en este caminar.

Cuarenta años celebrando Bautizos, Bodas, llevando la Comunión a los enfermos, realizando servicios funerales, visitando a los encarcelados y celebrando la Palabra en el altar para predicar y repartir la Comunión, al sustituir a un sacerdote más que otro, cientos de retiros espirituales predicados, catequesis a los militares, charlas, conferencias y talleres en las parroquias, incluso para recaudar fondos para operaciones de riñones, corazón abierto, diálisis y tratamientos,  ha sido parte del trabajo apostólico realizado durante mis 60 años de vida apostólica, la cual inició desde niño.

Dos capillas creadas en Villa Mella, además de mi apoyo para la construcción de una Parroquia en el sector, mi participación en la Parroquia San Judas Tadeo, en la Parroquia Nuestra Señora de la Altagracia del Ministerio de las Fuerzas Armadas y la creación y construcción de la Comunidad del Buen Pastor del Evaristo Morales, con su hermosa Parroquia, han sido parte de nuestra labor.

La creación de un colegio que por más de 30 años transformo a miles de jóvenes convirtiéndolos en seres humanos excelentes, de una Escuela Nocturna en San Judas Tadeo para el servicio doméstico y obreros, la cual dirigí por 10 años.

Hoy cuando miro hacia atrás desde tan lejos y recuerdo toda esta trayectoria de trabajo, de entrega a mi Señor, para glorificarlo, le doy gracias por haberme elegido, pero me sorprendo, no solo por todo lo hecho, sino por la fe y el amor con el que el Padre me ha tratado al tenerme que dedicar a otras tareas asignadas por Él en Su Empresa de Dios 24/7.

Llegar incluso a vivir de la nada, confiado en que Dios provee a través de sus hijos amados y elegidos para apoyarme en esta tarea, no me ha sido fácil.

Mi comunicación es tan efectiva con mi Dios que, cada vez que me dirijo a él en la desesperación de las carencias, para consultarle cómo abordar a quienes en ocasiones se olvidan de mí, Él me responde, no pierdas tiempo en eso y ponte a trabajar.

Es entonces cuando de nuevo me siento a las 5 de la mañana hasta las 8 de la noche, con períodos muy cortos de descanso, todos los días, a avanzar en mis siete libros, a plasmar mis mensajes diarios inspirados por el Espíritu Santo, a enviarlos a los 65 países, me alertan los cinco llamados de las mezquitas y recuerdo que es el momento de orar por todos ustedes, tomo la lista de quienes me han pedido oración y quienes yo he agregado y se los presento al Padre uno por uno.

Durante todo este tiempo recibo todos los días llamadas de personas con problemas, afligidas, desesperadas, que necesitan oración, palabras de aliento, de ese bálsamo de amor que solo Dios les puede dar, utilizando a este indigno siervo de Él.

Estoy sorprendido conmigo mismo, con modestia o sin modestia esta es mi realidad, mi nueva misión solo podía ser posible, si obedecía al Señor y me situaba en estas tierras benditas en las que inició el cristianismo, para recibir las vibraciones y energías que transmiten sus templos, su historia, sus recuerdos, sus fuerzas espirituales.

Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad, solo me resta pedirte que no me abandones, no dejes de proveerme el pan de cada día, no permitas que caiga en tentaciones y líbrame del mal, que sea yo el lazo que una los corazones tristes, desolados, desesperados, con tu amor, gracias por escucharme siempre y elegirme una vez más, dame la paz y tranquilidad para dedicarme a tus asuntos. Amén

Este mensaje ha llegado a todos ustedes gracias al apoyo recibido por nuestro hermano Omar Ramos.

Hasta la próxima.

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